Exodus. El éxodo de Scott

jueves, diciembre 04, 2014 0 Comments A+ a-

Este año tocaba nueva película del director Ridley Scott, creador de clásicos de la ciencia ficción como 'Blade Runner' y 'Alien', así como de otras películas estimables. La decaída y falta de puntería que arrastraba el británico con sus últimas películas, no hace más que confirmarse tras ver 'Exodus: Dioses y Reyes'.


Doy por hecho que el argumento es conocido por todos, pues trata una vez más el pasaje de la Biblia en que Moisés (Christian Bale, 'American Psycho') se rebela contra el poderoso ejército de Rámses (Joel Edgerton, 'Warrior). Los problemas que encontramos en la cinta son numerosos, pues una vez más sigue el camino de las superproducciones hollywoodienses, dejando la historia al servicio de los efectos especiales, y no al revés. El guión es pésimo, los saltos temporales están horriblemente llevados, y los diálogos y relaciones entre los personajes parecen escritos por un niño chico. Moisés parece un superhéroe de la prehistoria (qué daño le ha hecho a Christian Bale ser el Batman de Nolan), que no sólo lucha como nadie, sino que es capaz de convencer a un pueblo entero en cuestión de segundos. Las relaciones entre los personajes son prácticamente inexistentes, siendo éstos totalmente planos. Christian Bale tiene que dejarse la piel por un personaje que le quita más de lo que le da, siendo el más destacable del reparto. Del plantel de secundarios sólo se salva John Turturro ('Barton Fink', 'Miller's Crossing'), que tiene unos minutos más que convincentes en pantalla. Quizá el resto de las interpretaciones no puedan brillar más por sus patéticos personajes (especialmente Aaron Paul), que por su labor actoral (excepto María Valverde Y Sigourney Weaver, que ponen de su parte para empeorar a sus personajes).


'Exodus: Dioses y Reyes' no funciona más allá de su envoltorio, siendo una película que no ofrece más que una factura técnica brillante. Hemos llegado al punto de crear películas épicas que tienen cualquier cosa excepto epicidad. La banda sonora de Alberto Iglesias cumple, aunque queda bastante claro que no está hecho para superproducciones.
No quiero dar más detalles de sus grandes errores, puesto que algunos conllevarían destripar el argumento. Sus virtudes (alguna escena realmente sensacional y unos efectos especiales muy buenos) se ven anuladas por sus lagunas de guión y la falta de conflictos interpersonajes. Para finalizar, se encarga de destrozar parte de la historia original, creando un final absolutamente patético e inverosímil.



Crítica escrita para lgecine.org