A primera vista - Amistad y dudas
En 2010 Daniel Ribeiro presentó el cortometraje Eu Não Quero Voltar Sozinho, con el que consiguió ganar multitud de premios. Dado el éxito obtenido, el director brasileño decidió reescribir el guion para llevar a cabo un largometraje con esa misma historia. El cortometraje se centraba en cómo afecta la llegada de Gabriel a Leo, y el posterior descubrimiento de su homosexualidad; sin embargo, la pelÃcula amplÃa completamente el mundo de Leo y sus relaciones con sus semejantes, especialmente con Giovana. Los mismos actores del corto son los que dan vida a sus personajes en el largo. Tres años más tarde, participan en un proyecto mucho más maduro, coincidiendo con el proceso natural sufrido por ellos en ese lapso de tiempo.
Leonardo es un joven ciego que, a pesar de su incapacidad, no es el tÃpico chico marginado. Es indudable que no termina de relacionarse con los demás como le gustarÃa, pero desprende una vitalidad que contrasta mucho con su situación. Tiene una intensa relación de amistad con Giovana, pero eso no le hace ocultar sus ganas de irse de intercambio a otro paÃs en el que poder empezar de cero. Pero un dÃa llega Gabriel, un nuevo compañero de clase que dará un vuelco a las vidas de Leo y Giovana. Se formará un triángulo, a veces de amistad, otras de amor, en el que esta aparición interferirá directamente en la relación entre los amigos, y hará que Leo cambie por completo su percepción acerca de muchas cosas.
A pesar de tratar temas como la homosexualidad y la discapacidad, el enfoque de Ribeiro no da prioridad a ambos supuestos. El relato que cuenta es universal. Es una historia sobre la amistad y el amor, sin que adquiera importancia el que uno sea ciego, cojo, homosexual, transexual o alopécico. La etapa de (re)descubrimiento que vemos llevar a cabo a Leo, no es diferente a la que pueda tener cualquier otro joven de su edad. Si acaso podrÃamos apreciar un proceso, por lo general, mucho más optimista e iluminado. No es una simple coincidencia que los colores que predominan en la pelÃcula sean luminosos y vayan casi siempre acompañados de claridad. Un trabajo que en su forma resulta bastante personal, cercano a eso que llamamos el cine de autor, pero que traslada a la pantalla una historia de lo más accesible y universal. Cine para todos con un tratamiento visual exquisito.
La caras jóvenes del reparto aportan frescura y naturalidad, permitiendo asà que la historia adquiera la suficiente credibilidad y coherencia. Los tres protagonistas se conocÃan de haber rodado el corto que precede a la pelÃcula, por lo que la quÃmica existente entre ellos ayuda sobremanera a lograr cierta unidad. Y a pesar de lo bonita que es la historia, A primera vista acaba acusando un poco el hecho de haber sido concebida inicialmente como un cortometraje. En cuanto el desarrollo de la trama pide a gritos ir más allá, sólo encontramos situaciones obvias y que hemos visto en innumerables ocasiones. Ribeiro no ahonda correctamente en los temas primordiales a tratar, y además parece querer abrir muchos otros sin un sentido o una importancia argumental determinada. El chicle se estira y la propuesta acaba aquejando una notable pérdida de fuerza e interés.
A primera vista no termina de sorprender, quedándose como una bonita e interesante historia más, muy alejada de ser notable, algo hacia lo que apuntaba con sus intenciones iniciales. Pero quedémonos con que es una ópera prima, pues ya quisieran muchos directores haber empezado con tan buen pie. Daniel Ribeiro apunta muy buenas manera, y en A primera vista consigue, como mÃnimo, atraer toda mi atención de ahora en adelante.